Diferencias entre alergias alimentarias, intolerancias y Enfermedad Celíaca

Diferencias entre alergias alimentarias, intolerancias y Enfermedad Celíaca

“¿Se puede ser alérgico al gluten?”, “La intolerancia al gluten ¿existe?”, “¿Puedo hacerme el test de intolerancias para saber qué alimentos me afectan?” ,”¿La alergia a la leche es lo mismo que la intolerancia a la lactosa?”, “¿Ser celíaco es ser intolerante al gluten, o alérgico?”, “¿Te puedes morir por una reacción alérgica?” 

Posiblemente hayas leído u oído en múltiples ocasiones estas asociaciones, pero muchas de ellas son incorrectas. Por eso, en este artículo con el que doy pistoletazo de salida a este blog, quería comenzar con algo muy básico que todos deberíamos conocer, y es que sigue existiendo mucha confusión generalizada entre la diferencia que existe entre las alergias y las intolerancias. Trataré de explicarlo de la manera más sencilla, accesible, fácil y cercana posible. Pero antes de pasar a las definiciones, vamos a ver conceptos aún más básicos para poder entender el resto.

¿Qué es un alérgeno? 

Un alérgeno es cualquier sustancia que puede producir una reacción de hipersensibilidad en individuos que ya hayan estado en contacto con el mismo. Hablamos de alérgenos ambientales, alimentarios y sustancias como los medicamentos y picaduras de insectos (puedes encontrar varios ejemplos en la tabla que se mostrará más adelante). En cuanto a los alérgenos alimentarios, ¿sabías que existen más de 160? Seguramente te estarás preguntando porqué solo oyes hablar de 8 o 14 (dependiendo del país), y es que, este último número son los alérgenos de obligada declaración que aparece en la legislación vigente (en Esopaña), estos son:

En este reglamento (Reglamento Europeo 1169/11 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor y Real Decreto 125/2015) , se debe declarar el alérgeno en cuestión, presente en los platos o productos envasados. Debes saber, además, que las trazas no son de obligada declaración, pero se debe indicar si el producto se ha fabricado o envasado en una instalación donde se manipulan esos alérgenos, o si alguno de sus ingredientes pudiera contener cantidades mínimas (la famosa frase de “puede contener trazas de…”). 

Clasificación de alérgenos

Los alérgenos pueden ser de diversa índole, que encontrarás a continuación:


¿Qué son las Inmunoglobulinas? 

Las inmunoglobulinas (anticuerpos) son proteínas que se encuentran en nuestra sangre que se encargan de combatir la defensa de nuestro organismo cuando detecta una sustancia “tóxica” o nociva para nuestro cuerpo. 

Existen distintas modalidades de anticuerpo, llamadas isotipos. Hay cinco tipos diferentes de isotipos en mamíferos que desempeñan funciones distintas y contribuyen a dirigir la respuesta inmune adecuada para cada distinto tipo de cuerpo extraño para nuestro  cuerpo. Los isotipos de anticuerpos son IgM, IgE, IgG, IgD, IgA y cada uno de ellos tiene un grupo de funciones en el sistema inmunológico. Para entender más específicamente la diferencia entre alergias e intolerancias, solo hablaremos de las inmunoglobulinas que están presentes en estos casos; la IgE y la IGg:

  • La inmunoglobulina E (IgE) está implicada en los procesos de alergia (reacciones del tipo I de hipersensibilidad).
  • La inmunoglobulina G (IgG) es el tipo predominante de anticuerpo en la sangre humana.

Es importante que conozcas este término para que entiendas más específicamente las diferencias entre alergias e intolerancias.

Entonces, ¿Cuál es la diferencia entre una alergia y una intolerancia?

  • La alergia es una respuesta exagerada de nuestro sistema inmunológico frente a cualquier tipo de alérgeno. Esta ocurre cuando el organismo interpreta que determinada sustancia es invasora. Esto provoca una respuesta adversa por parte del sistema inmunológico: la reacción alérgica, en la cual el organismo libera una serie de sustancias químicas, como la histamina, para protegerse. Esta reacción suele ser inmediata o puede tardar en aparecer hasta dos horas, y  para desarrollarla se necesita una exposición al alérgeno que puede ser muy diversa, como vimos anteriormente en la clasificación de los alérgenos. Es decir, se puede dar por contacto, ingesta, o inhalación, aunque sea en pequeñas cantidades. Por ejemplo, por oler los vapores de un pescado que se está cocinando, se puede desencadenar una reacción alérgica, así como un beso tras haber ingerido algo a lo que la persona es alérgica, por eso siempre digo que los besos, mejor sin trazas ;) . Los alérgenos suelen ser proteínas y excepcionalmente, algunos hidratos de carbono (azúcares), que pueden también generar anticuerpos, actuar como alérgenos y provocar reacciones alérgicas. Aunque todavía se desconocen ciertos aspectos que hacen que una molécula de ser alergénica y causar alergia.

“ En la alergia a los alimentos, la reacción del organismo se produce frente a las proteínas; nunca ante azúcares, porque entonces estaríamos hablando de intolerancias, que se manifiestan por causas digestivas, no inmunológicas.”

  • Las intolerancias alimentarias o la alergia a alimentos no mediada por IgE se produce debido a muchos factores, pero las tres causas principales son: la carencia de una enzima necesaria para asimilar dicho alimento, la alteración de la flora intestinal o mayor permeabilidad del intestino. Es importante tener en cuenta que no se es intolerante a un determinado alimento, sino que se es intolerante a una determinada sustancia que uno o más alimentos contienen. (Por ejemplo, la lactosa, que es el azúcar presente en la leche, yogures y derivados). El uso del término “intolerancia alimentaria” puede generar confusión. En realidad, las únicas intolerancias reconocidas por la comunidad médica son las que tienen que ver con algunos azúcares como la lactosa o la fructosa y el gluten, aclarando que esta última es una enfermedad autoinmune que genera una respuesta inmunológica contra el propio cuerpo al entrar en contacto con este alérgeno (también existe una asociación errónea con la “intolerancia al gluten” que veremos en el apartado siguiente). El resto de los problemas que impiden procesar los alimentos correctamente forman parte de un trastorno denominado inflamación alimentaria. Los síntomas, al contrario que en las alergias tardan más en aparecer (desde dos horas tras la ingestión, y hasta días después) y pueden ser crónicos, llegando a verse afectado el estado nutricional. 

¿Por qué no existe la intolerancia al gluten?

Siempre hemos oído hablar de intolerancia al gluten, pero desde Mayo de 2018, cuando se publicó el nuevo Protocolo de Diagnóstico Precoz de Enfermedad Celíaca, esto ya no es así. Por ese entonces, un comité de expertos se reunió para sentar las bases de la Enfermedad Celíaca y llegaron a la conclusión de que a partir de ahora, se haría una diferencia entre la Enfermedad Celíaca y la Sensibilidad al Gluten no Celíaca. ¿Qué significa esto?

  • La Enfermedad Celíaca (EC) o Celiaquía “es una enfermedad sistémica inmunomediada, provocada por el gluten y prolaminas relacionadas, en individuos genéticamente susceptibles, y se caracteriza por la presencia de una combinación variable de: manifestaciones clínicas dependientes del gluten, anticuerpos específicos de EC, haplotipos HLA DQ2 o DQ8 y enteropatía” - esta definición fue actualizada por la ESPGHAN, Sociedad Europea de Gastroenterología Pediátrica, Hepatología y Nutrición en 2012.  A diferencia de las alergias, que activan un componente de nuestras defensas llamado inmunoglobulinas E (IgE), en el caso de la celiaquía, esta reacción está mediada por las inmunoglobulinas G (IgG) o las A (IgA). En la EC, la incapacidad de digerir el gluten genera una reacción que provoca que la mucosa del intestino de las personas con celiaquía se inflame y se produzca la destrucción de las vellosidades intestinales que ayudan a absorber los nutrientes. Además, la celiaquía se asocia con mayor riesgo de otras enfermedades de como psoriasis o dermatitis herpetiforme, artritis reumatoide o enfermedades hepáticas. La celiaquía tiene un componente genético, al igual que la intolerancia a la lactosa o a la fructosa.

  • Síndrome de intolerancia/ Sensibilidad al Gluten/ Trigo No Celíaca es reacción al gluten u otros componentes del trigo identificada hace más de 30 años y caracterizada por presentar síntomas digestivos y extraintestinales desencadenados por la ingesta de gluten/trigo. La padecen pacientes que mejoran con una dieta sin gluten, sin embargo no cumplen los criterios diagnósticos de celiaquía ni de alergia al gluten.

  • La intolerancia al gluten es la manera que se tenía (y tiene) de referirse erróneamente a las personas celíacas, pero, como hemos visto, una intolerancia afecta solo al sistema digestivo, y en el caso de la Enfermedad Celíaca afecta a muchos sistemas e interviene el sistema inmunológico, por tanto, NO ES UNA INTOLERANCIA

“La celiaquía es, además de una enfermedad autoinmune y sistémica, una alergia no mediada por IgE y denominarla intolerancia al gluten no es correcto, tal y como explicó la Vicepresidenta de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP)”

¿Qué ocurre con el gluten?

Es muy común que entre la comunidad de personas alérgicas, cuando vamos a cualquier sitio y nos identificamos como “personas con alergias”, nos asocien enseguida con las personas que padecen celiaquía y les afecta el gluten. Como hemos comentado anteriormente, el gluten es un alérgeno de entre los 14 de obligada declaración y produce una hipersensibilidad en nuestro organismo a las personas que les afecta este alérgeno, pero NO ES EL ÚNICO

El gluten es una proteína que  en cereales como el trigo, la cebada y el centeno (incluyendo variedades como el kamut, la espelta, el triticale o el triordeum y el khorasan). La avena siempre se presta a confusión, pero es un alimento naturalmente libre de gluten. Sin embargo, por su origen común los cereales con gluten, la hace ser muy parecida y tener unas proteínas prácticamente idénticas. A pesar de que la avena es naturalmente sin gluten, hasta hace poco era prácticamente imposible encontrarla apta. Esto es por la contaminación cruzada que se produce en su cultivo, recogida, molienda y envasado.

¿Se puede ser alérgico al gluten?

El trigo contiene muchas sustancias que pueden provocar en algunas personas, alergia, y, en otras, reacciones adversas en el organismo. Como ya hemos visto, el gluten es un alérgeno y una proteína y, por tanto, puede producir una reacción adversa del organismo. Lo más frecuente es que este alérgeno afecte a personas con Enfermedad Celíaca, pero si está mediado por la inmunoglobulina E, también puede desencadenar una reacción alérgica.  Según el protocolo de diagnóstico precoz de la Celiaquía, podemos encontrar las siguientes definiciones:

  • Alergia al gluten:  “reacción de hipersensibilidad, generalmente mediada por inmunoglobulina E, frente al gluten”.

  • Alergia al trigo: “reacción de hipersensibilidad mediada por inmunoglobulina E frente a componentes antigénicos del trigo que constituye una  alergia alimentaria”. El trigo presenta muchas proteínas en su composición; entre ellas se encuentra el gluten, pero si afecta más de una podremos hablar del alérgeno “trigo” en general. Lo mismo ocurre con el huevo, se puede ser alérgico a la yema o a la clara, o “al huevo” si te afectan las dos.

“La Enfermedad Celíaca ha tomado mucho protagonismo en los últimos años, pero las alergias siempre han estado ahí, y siguen pasando desapercibidas a pesar de sus peligrosos riesgos. La gente no entiende la diferencia entre la gravedad de la ingesta de gluten en una persona alérgica”

¿Cómo saber si soy alérgico o intolerante?

Para saber si padeces alguna alergia o intolerancia, debes ser capaz de saber detectar las reacciones en cada caso para posteriormente, plantearlo en consulta médica, que te deriven a un especialista y que puedan hacerte las pruebas, seguimiento y diagnóstico de manera más efectiva.

Las alergias producen los siguientes síntomas, que aparecen por ingesta, contacto o inhalación con algún alérgeno: 

  • Picor/comezón y enrojecimiento de la piel (en las manos, pies, oídos, lengua, boca, garganta o donde haya tocado el alérgeno)
  • Estornudos
  • Náuseas y vómitos, seguidos del resto de síntomas
  • Urticaria (ronchas en la piel en forma de habones)
  • Nariz taponada
  • Sensación de malestar y picor en la gargante
  • Falta de aire y dificultad en respirar
  • Dolor abdominal y exceso de gases
Foto de una reacción con síntomas de urticaria tras un beso en la cara  después de esa persona haber estado con un perro (soy alérgica)

Cuando existen síntomas de la intolerancia, se pueden dar en las siguientes horas, incluso días, y se produce a nivel gastrointestinal. Estos son:

  • Distensión abdominal (la barriga se hincha, incluso parece una barriga de embarazo)
  • Diarreas
  • Migrañas
  • Gases
  • Flatulencias
  • Borborigmos (ruidos)
  • Malestar 
Foto: distensión abdominal (¡no es un embarazo!)

¿Cuáles son las pruebas para detectar intolerancia o alergia alimentaria?

Es importante saber que solo determinadas pruebas pueden detectar si padeces una alergia o de una intolerancia alimentaria. Toda persona de la que se sospeche una posible alergia alimentaria por padecer una sintomatología con alguna o algunas de las manifestaciones antes mencionadas, debería ser derivado al especialista (digestivo o alergólogo) para su valoración y diagnóstico.

Para diagnosticar las alergias alimentarias, se han de hacer las siguientes pruebas:

  • Historia clínica detallada
  • Test cutáneo Prick-test: en este test se compara la reacción al alérgeno con un patrón de referencia, que es la histamina (como vimos antes, la hormona que segrega nuestro cuerpo para protegerse).
  • Análisis de sangre: donde se mide la IgE total y específica por alimentos en suero.
  • Pruebas de exposición/ provocación controladas, en caso necesario, para confirmar o descartar una alergia a alimento, y siempre realizadas en entornos hospitalarios.

En cuanto a las intolerancias alimentarias, pueden diagnosticarse:

  • A través de un test genético, donde se mide la capacidad de producir o no, diferentes enzimas digestivas. En algunos casos como la celiaquía, si el test es positivo, podemos necesitar pruebas adicionales para conocer nuestra respuesta ante la enfermedad. Normalmente el diagnóstico de una intolerancia alimentaria (IA) lo realiza un Médico especialista en el Aparato Digestivo.

Las principales intolerancias que podemos encontrar validadas científicamente y que cubre la Seguridad Social (En España) l, principalmente a través del test del hidrógeno espirado son:

  • Intolerancia a la lactosa (no confundir con la alergia a la proteína de leche de vaca)
  • Intolerancia a la fructosa y al sorbitol: frecuente en pacientes con colon irritable. No confundir con la intolerancia hereditaria a la fructosa.

¿Y qué ocurre con los test de intolerancias?

Quizás hayas oído hablar de los test de intolerancia alimentaria, que no he nombrado entre las pruebas de diagnóstico, y son los que se realizan en empresas privadas (farmacias, centros médicos privados, laboratorios, herbolarios…) y que suelen rondar los 300€-700€. Suelen medir la IgG  específica a alimentos múltiples (la elevación de anticuerpos IgG  específicos no indica reactividad  al alimento, sino más bien lo  contrario). El diagnóstico suele ser más complicado por la dificultad de establecer la relación entre la ingesta del alimento causante y la reacción. A ello se suma que no existe a día de hoy evidencia  validada científicamente para este tipo de intolerancias.

Un resumen de las diferencias entre intolerancias y alergias alimentarias

¿Con alergia se nace o se hace?

En cualquier momento de tu vida puedes desencadenar una alergia. ¿Por qué? Cuando se produce una reacción alérgica, significa que ya hemos estado expuesto a ese alérgeno en otra ocasión, aunque creas que nunca lo has comido/ tocado. Por ejemplo, ese alérgeno podría haber estado presente en la leche materna cuando tomabas la alimentación de tu madre. Es posible que durante la infancia puedan superarse algunas alergias más comunes como la leche y el huevo, gracias a las pruebas de sensibilización, pero una vez alcanzada la edad adulta, es más difícil que se desvanezcan. 

Reflexión

A la comunidad de personas diagnosticadas con alergias, intolerancias y enfermedades con restricciones alimentarias como la enfermedad celíaca, nos afecta mucho la desinformación que existe en la sociedad, sobre todo por las personas que se autodiagnostican o “fingen” padecer alguna de ellas. Te rogamos, tengas en consideración toda esta información para las personas de tu entorno. La inclusión alimentaria es cosa de todos, y mañana, te podría tocar a ti.

Si crees que esto pudiera ayudar a alguien, compártelo, incluso con tu entorno, para fomentar la inclusión alimentaria. 

Un beso sin trazas para todos.

Si es la primera vez que te pasas por aquí, soy Alba y mi misión es acompañarte para mejorar tu calidad de vida con alergias alimentarias a través de todos los conocimientos que he adquirido gracias a mi experiencia como multialérgica.